JOSE RUFINO ECHENIQUE BENAVENTE (1851-1855).
Los Presidentes del Perú,
JOSE RUFINO ECHENIQUE BENAVENTE (1851-1855).
Nació el 16 de
noviembre de 1808, en Puno. Sus padres fueron José Martín Echenique Vásquez y
Hermenegilda Benavente Macoaga.
En un viaje al Cusco,
al iniciarse la revolución encabezada por el brigadier Mateo García Pumacahua
(1814), fue arrebatado de sus padres por un indio en el pueblo de Phara, cuando
se planeaba la matanza de los españoles allí existentes; acogido por una
familia indígena, se dedicó al pastoreo; hasta que al cabo de dos años fue
reconocido por un conductor de correos y devuelto a sus padres.
Pasó a Lima donde
ingresó al Colegio del Príncipe. Proclamada la Independencia, fue presentado
ante el protector San Martín e inscrito como cadete en las filas del batallón
Nº 3 de la Legión Peruana (1822).
Pronto ascendió a
subteniente y como tal participó en la segunda Expedición a Intermedios, bajo
las órdenes del general Agustín Gamarra; y conducido a prisión en el combate de
Alsuri, permaneció en la isla de Esteves hasta fines de 1824. En 1835 fue
ascendido a coronel, pasando a comandar la guarnición del Cusco; se retiró del
servicio al efectuarse la intervención boliviana.
Se dedicó a la agricultura,
en la hacienda azucarera de San Pedro (Lurín); y con espíritu emprendedor,
introdujo el primer trapiche a vapor. Debido a la insistencia del supremo
director Manuel Ignacio de Vivanco, aceptó desempeñar la prefectura del
departamento de Lima (1843); como tal, salio hacia la sierra para detener el
avance de las fuerzas constitucionales acaudilladas por el general Ramón
Castilla.
Ascendido a general de
brigada (1844) fue sucesivamente consejero de Estado (1845), ministro de Guerra
y Marina (1846-1847) y presidente de la República (1851-1855), elegido en
controvertidas elecciones.
Durante su mandato dio
una Ley de Amnistía (1851) que benefició a Manuel Ignacio de Vivanco y obtuvo
para el Perú el derecho a la libre navegación a lo largo del Amazonas, mediante
la convención fluvial suscrita con el gobierno de Brasil. Mandó a construir las
fragatas Apurímac y Angamos.
Finalizó la
construcción del ferrocarril Tacna-Arica y embelleció la Alameda de los
Descalzos. Sin embargo, los escándalos próximos con motivo de la consolidación
de la deuda interna y su parcial conversión en deuda externa dieron lugar a un
amplio cuestionamiento a su gestión.
La crisis de su
gobierno se agravó cuando el general Ramón Castilla, inició una acción armada,
dando a su campaña un acentuado carácter liberal mediante la promesa de la
abolición de la esclavitud y del tributo indígena.
La campaña culminaría con el
triunfo definitivo de Castilla en la Batalla de La Palma (1855) José Rufino
Echenique salió entonces al destierro, publicando Manifiesto en Nueva York.
Falleció en Lima en el año 1887.